domingo, 18 de marzo de 2012

Intocable

Francia es una potencia cinematográfica de la cual estamos a años luz e Intocable es una prueba de ello. El presupuesto y la experiencia se nota e Intocable es una comedia que vuelve a llenar las salas no solo en Francia, sino en toda Europa, siguiendo la estela de otras predecesoras como Amelie, Bienvenidos al Norte o La cena de los idiotas, películas, eso sí, muy diferentes unas de otras.


Quizá Intocable sea la menos ambiciosa de todas y aun así está consiguiendo más éxitos que fracasos. Se trata de una comedia, inspirada en hechos reales, que juega con las diferencias entre las clases sociales. No se trata de una Princesa por Sorpresa (gracias a Dios) y es mucho más inteligente haciendo que el humor sea fresco y casi nunca forzado.

La actuación es notable, pero el guion, aun sabiendo que debe basarse en hechos reales, abusa en algunos momentos de previsible. Se echan de menos algunos cambios de giro y la progresión de sus personajes, aun existiendo, parece que va a trompicones y llega a desconcertar. Por otro lado, ciertos puntos cómicos no pueden comprenderse bien a este lado de los Pirineos y eso hace que en algún momento la risa esperada no pueda llegar, aunque siempre se intenta.

Tras ver Intocable, uno vuelve a casa con un sentimiento agradable, tal y como pretendía la película pero le quedan algunas dudas de si la película apuesta por eliminar las diferencias raciales o si en el fondo es conformista y se queda corta en su intención integradora.

Aun con todo ello, es una película muy bien hecha, que deja con un buen sabor de boca (aunque no habrían venido mal aún más puntos cómicos). 6.7 / 10